Ofrece una experiencia gastronómica fresca concentrándose en la cocina auténtica del Cusco y del Valle Sagrado, cuyas raíces se remontan a los tiempos pre-incas. El menú está inspirado en las especialidades tradicionales de cocineros caseros locales, picanterías y “puestos” de la calle y en base a ingredientes inusuales procedentes de pequeños productores. La decoración minimalista cuenta con maderas oscuras y una iluminación suave para crear un ambiente íntimo.

Es difícil resistirse a un refrescante coctel en este vibrante bar junto a la piscina. Disfrute del tentador menú ligero que ofrece platos coloridos y vinos exclusivos de América del Sur. También puede elegir refrescantes sabores tropicales desde una cesta de frutas al aire libre para crear su propio jugo o ensalada.