Las seis habitaciones de Greystoke están totalmente en consonancia con el entorno. Cuando Roland Purcell estableció su campamento aquí, él era consciente de la responsabilidad de asegurar una huella ligera. Construidas con madera de tanga y madera de dhow recuperada, cada una de las habitaciones de frente abierto está escondida en el límite arbóreo, casi invisible para los pescadores que pasan en sus pequeñas canoas. Todas las habitaciones tienen porche y un salón chill-out arriba con vistas a la arena blanca a la inmensidad del lago Tanganyika.

Las habitaciones son de frente abierto con grandes cortinas de lona que se pueden cerrar en caso de tormenta. Las camas individuales o dobles se encuentran debajo de una red con toldo. Los huéspedes pueden usar el baño en suite con un secador de pelo, albornoces suaves y batas. Hay agua corriente aquí, con una caldera que está encendida bajo petición para preservar la energía, y un baño de descarga. El rico follaje que le da al campamento tal carácter se puede disfrutar mientras se duchan en privacidad.