La isla de Santa Cruz alberga Puerto Ayora, la ciudad más grande y desarrollada de Galápagos. Aunque muchos viajeros la utilizan como trampolín para explorar las islas más remotas de los alrededores, aquellos que se adentren más profundamente descubrirán que Santa Cruz tiene mucho que ofrecer por sí sola. Con numerosos sitios para visitar, playas de fácil acceso y tierras altas remotas en su corazón, la isla es una base excelente para la aventura. Su atracción más famosa, la estación Charles Darwin, cuenta con un impresionante programa de cría de tortugas y fascinantes exhibiciones sobre la conservación de la biosfera única de Galápagos. Los visitantes también pueden nadar o bucear en las magníficas playas de la isla, donde la arena blanca y las aguas turquesas están llenas de pelícanos, piqueros de patas azules e iguanas marinas.