El bosque nuboso de Monteverde ofrece una gran biodiversidad y es uno de los más intactos y conocidos en el mundo. Atrae a científicos y turistas por igual.

Es uno de los mejores lugares para observar el resplandeciente Quetzal, uno de los más hermosos entre las 400 especies de aves que se encuentran. Ofrece una variedad de hoteles, restaurantes, galerías, insectarios, serpentarios, jardines de orquídeas y colibríes, y actividades como tours de canopy, paseos a caballo y caminatas guiadas para observación de aves, botánica, ecología y la vida nocturna del bosque nuboso.