Después de tomar el desayuno, visitaremos Zipaquirá para tener una aventura religiosa a 180 metros de profundidad. La increíble catedral de Sal de Zipaquirá lleva la arquitectura religiosa a otros niveles. Esta iglesia fue tallada en el interior de una mina de sal que ha sido explotada desde 1801. Usted recorrerá las galerías de la mina observando sus túneles, las inmensas cruces talladas en cristales de sal y su cámara principal, con capacidad para albergar hasta diez mil fieles. Además, durante el recorrido, podrá recorrer las 14 Estaciones del Viacrucis, talladas en Roca de Sal y representan las diferentes etapas vividas por Jesús desde el momento en que fue aprehendido hasta su crucifixión y sepultura.