Situada en la desembocadura del Río Dulce en el Golfo de Honduras, la ciudad de Livingstone cuenta con un ambiente relajado, una rica cultura local, hermosas playas y fértiles vistas naturales. Los garífunas que viven aquí son cálidos y les encanta celebrar la vida con una increíble música tradicional y bailes en los muchos bares vibrantes. Asegúrese de probar la cocina distintiva: el delicioso guiso de mariscos «tapado» y el ron de cosecha propia conocido como «gifiti». Entre la densa selva verde, las aguas de jade del río y los altos y brumosos acantilados, los amantes de la naturaleza pueden observar manatíes, cocodrilos y monos, o explorar la Punta de Manabique, un paraíso de hermosas especies de aves. Las aguas azules del océano son perfectas para paseos en bote, paddleboard y kayak.