El Ponte Vecchio es el puente más antiguo de Florencia y es uno de los puentes más famosos de Italia. Construido en la época medieval, este puente de arco segmentario de piedra ha logrado convertirse en uno de los monumentos más ilustres de la ciudad. En su larga historia, fue aumentada y reconstruida varias veces y también ha sobrevivido a la Segunda Guerra Mundial. Inicialmente, este puente albergaba carniceros y vendedores de pescado, sin embargo, hace unos siglos se transformó en una popular atracción turística, y las tiendas ahora se centran en la venta de joyas, arte y recuerdos.