Ubicado en la región norte de las canteras de piedra del antiguo Egipto en Asuán, el Obelisco Inacabado es un monumento de 3.500 años de antigüedad que fue abandonado cuando se formaron grietas en el granito. Si se hubiera completado, habría medido 42 metros y habría pesado alrededor de 1200 toneladas, lo que lo convierte en el obelisco más alto y pesado. Como están las cosas, el Obelisco inacabado es la tragedia más grave de los levantadores de obeliscos, un recordatorio duradero de los límites de la ingeniería humana.